Salla Simukka (1981) es un nombre muy establecido en la literatura juvenil finlandesa. Su salto a la fama internacional se ha dado con la trilogía 'Me llamo Lumikki', de la que Rojo como la sangre es la primera parte, con publicación en 50 países de todos los continentes. Como indicó el jurado del premio Topelius cuando lo ganó, "sus obras contienen mensajes importantes, tanto sobre los individuos (el derecho a ser uno mismo) como sobre la sociedad (las presiones del poder, la libertad de elección)".